FISIOTERAPIA ONCOLÓGICA

FISIOTERAPIA ONCOLÓGICA

 

¿Qué es la fisioterapia oncológica?

La fisioterapia oncológica es la parte de la fisioterapia que se encarga de tratar las secuelas que aparecen tras la aplicación de los tratamientos dirigidos al cáncer.

Existen muchos tipos de tumores, con distintas localizaciones, y en todos ellos han de tratarse las secuelas derivadas de los tratamientos aplicados.

 

¿En qué podemos ayudarte en Pelvitae?

Como ya hemos señalado, han de tratarse siempre las secuelas de los tratamientos en todo tipo de cáncer.

En Pelvitae estamos especializadas en cáncer de mama y cánceres ginecológicos.

Un cáncer ginecológico es cualquiera que se origine en los órganos reproductores de la mujer: cáncer de cuello uterino, cáncer de ovario, cáncer de útero, cáncer de vagina y cáncer de vulva.

 

Tratamientos 

En su tratamiento pueden existir diversas vías de actuación, que dependerán del tipo, localización, estadio y otras variables a determinar por los y las especialistas que proceda.

Entre los tratamientos se encuentran: cirugías (mastectomía, linfadenectomía, histerectomía, etc.), quimioterapia, radioterapia, hormonoterapia, y todas estas terapias pueden aplicarse combinadas.

Dependiendo del tratamiento o tratamientos que se decidan aplicar, será aconsejable recibir fisioterapia previa al tratamiento, durante la aplicación del mismo, y/o una vez finalizado. El tratamiento aplicado desde la fisioterapia de adaptará al momento y a los objetivos que se quieran conseguir dependiendo también del mismo.

 

Secuelas de los tratamientos

Hemos de conocer las secuelas que pueden derivarse de los tratamientos recibidos citados anteriormente, ya que su incidencia es bastante alta, y se ha de recibir tratamiento para conseguir la mejor calidad de vida posible.

Entre las secuelas que puede haber, destacamos las siguientes:

  • Dolor (de diferentes características y localizaciones).
  • Disfunciones del suelo pélvico: Disfunciones sexuales (dolor a la penetración, sequedad vaginal, etc.), incontinencia urinaria, prolapso de órganos pélvicos.
  • Cicatrices: Molestias, tensiones, dolor, sensaciones de otro tipo como hormigueos, zona “dormida”, etc..
  • Linfedema: derivado de la extirpación de ganglios linfáticos.
  • Pérdida de movilidad y fuerza: como por ejemplo en el hombro, tras los tratamientos dirigidos al cáncer de mama.
  • Fatiga.

Todas estas secuelas deben tratarse, y pueden mejorar con nuestra ayuda y vuestro esfuerzo y constancia.

 

¿Qué podemos hacer por vosotras desde la fisioterapia?

  • Terapia manual.
  • Drenaje linfático manual.
  • Ejercicio terapéutico.
  • Pautas higiene postural.
  • Readaptación al ejercicio y otras actividades.
  • Radiofrecuencia (con permiso expreso del profesional responsable del proceso).

 

Sara Bejarano Pérez

Fisioterapeuta especialista en suelo pélvico

Si quieres conocer más o tienes alguna duda al respecto, no dudes en ponerte en contacto con nosotras.

¡Escríbenos y te daremos cita lo antes posible!

 

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